Hoy iniciamos nueva sección en
el Blog. Una parte culinaria de restaurantes, bares y demás. Hace relativamente
poco que nos ha despertado el gusanillo del hambre y hemos iniciado una
andadura culinaria a través de las calles de Berlín. Porque en Berlín lo de
bueno, bonito y barato en estas cuestiones SI existe.
THE BIRD
Empezamos abriendo boca con el
conocido y famoso The Bird, desconocido para nosotros hasta la fecha, viviendo
al lado y habiendo pasado por esa calle mil y una veces!
Decidimos ir de casualidad, era
Sábado y tarde, sobre las 16:00. No veíamos árbol del que colgarnos y dijimos
venga, porqué no!
En la terraza no había nadie, sí,
hace frío, pero sabemos cómo se las gastan los alemanes. El caso es que la
calle estaba vacía, al acercarnos a la puerta, nos percatamos de la realidad:
el interior estaba abarrotado.
Nada más entrar la Maitre nos
preguntó: -¿tenéis reserva?- mmm…. No? Después de esperar cinco minutos, sin
haberle dicho ni cuantos éramos ni nada, llegó y nos dijo que podíamos sentarnos
en una mesa, pero que estaba reservada a partir de las 18:00, así que ya
veríamos como lo apañábamos…
El caso es que ya estábamos sentados.
Ya que era la primera vez que íbamos, lo teníamos bastante claro: Hamburguesa!
El ambiente estaba a tope, música
inglesa e ingleses por todos lados. Por suerte, hoy las camareras no nos han
cambiado al inglés y hemos podido practicar nuestro alemancillo!
Decoración al más puro estilo
americano, mesas grandes, bancos corridos, grandes grupos de amigos, risas, música
alta, paredes donde cuelgan dibujos de los pequeños, pizarras con sugerencias
de la carta, camareros de negro moviéndose a toda pastilla, gente comiendo en
la barra…
Como siempre y siguiendo la
deutsche tradición, primero cerveza a la espera de nuestra comida. Nos decantamos
por la especialidad de la casa: Birdhouse burger.
Tardaron en servirnos un año,
vamos nuestros jarrotes de medio litro ya estaban vacíos. Otra, por favor!
La cocina está abierta, se
puede entrever cómo se hacen los platos, uno le da la vuelta a la carne, otro
coloca lechuga, otro corta patatas a la velocidad del rayo… de repente una
campana suena y en cuestión de un segundo, un camarero/a acude raudo y veloz y
vuelve cargado de platos listos a servir.
Tras ver la maratón de los
camareros, por fin la nuestra nos trae los platos. Grandes, muy grandes. La hamburguesa
alta, muy alta. Para lo que normalmente estamos acostumbrados. La hamburguesa
es bastante más alta que ancha, pero nada se escapa, escurre o cae, todo está
bien sujeto. El resto del plato, vegetales (si no tiene la lechuga y el tomate
dentro) y patatas, patatas por doquier.
La pinta no decepciona el
sabor. Realmente la carne sabe a nuestro concepto de ternera tradicional, lo
que es raro encontrar por aquí. Mucha comida, pero de calidad, en un ambiente
agradable, donde la internacionalidad te hace sentirte menos extranjero!
Se puede seguir la fiesta tras
la comida siguiendo con la carta de cócteles que nunca decepcionan!
Si os queréis acercar, no olvidéis
reservar un par de dias antes!
Pd- No os olvideis de probar sus famosisimas y conocidisimas een el mundo entero Chicken Wings!!
os dejo la dirección:
Am Falkplatz 5
10437 Berlin
+49 30 51053283
www.thebirdinberlin.com